Es igual que yo

¿Cuántas veces te han dicho “est@ niñ@ es igual que tú, que tu marido…”?

La gente tiende a buscar semejanzas entre los hij@s y los progenitores, entre herman@s o familiares… Buscan similitudes en el físico, en el carácter, en costumbres, en manías…

Puede hacer gracia cuando tú propi@ hij@ se parece a ti en cosas que aparentemente cres que són agradables y bonitas, te puedes alegrar y hasta enorgullecer.

Pero la cosa cambia cuando ves que se asemeja a ti en un aspecto que personalmente te hace sufrir, te produce malestar… Se busca la manera que esa sensación no invada a tu hij@ y no sufra, se desea eliminarle esa sensación ya que se sabe muy bien que no es agradable.

Cuesta entender como padre/madre que no tenemos una barita mágica que pueda cambiarlo todo, se puede notar frustración por parte del adult@ por no poder arrebatársela, ya que no se desea que sufra, si no verl@ siempre feliz. 

Es difícil entrar en su mente y borrar esta emocion, pero se puede aplanar el camino con mucho amor, empatizando y acompañando su malestar. Pero también hace falta aceptar que cada hij@ debe aprender a gestionar sus emociones a su manera y que debe también aprender de ellas.

Un abrazo

Anna

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s