Si le tuviéramos que poner un color a la maternidad, ¿Qué color le pondrías?
Pienso que, en general, no es ni el blanco ni el negro, sino que cada maternidad tiene su propio color.
Me gusta poner el blanco y el negro como los polos opuestos, pero dentro de estos dos colores hay una gama espectacular de tonalidades. Y así también ocurre con la maternidad, hay un sinfín de maneras de maternar, tantas como familias hay en el mundo.
A veces se puede tener tendencia a colocarse en un extremo para no ser juzgad@s, es decir, dentro de una corriente de crianza, de un método… Pero, como ya comentaba, muchas veces, se tiende a colocarse ahí para no ser juzgados y no sentirse excluido de un círculo social de maternidad confortable.
Pero qué pasa si no nos situamos en nuestra tonalidad, pues que puede que no actuemos desde el corazón sino más movidos por la corriente, por el método, por el gurú… y podemos sentirnos frustrados y creer que no lo estamos haciendo bien.
Y no es que no lo estemos haciendo bien, sinó que tenemos que encontrar de cada corriente, de cada gurú, de cada profesional, de cada método… aquello que se ajuste a nosotros y encaje en nuestra familia, para así crear la propia forma de maternar y paternar (encontrando así nuestro propio color). Que también puede ir modificándose según van creciendo l@s hij@s, según las experiencias y los aprendizajes,…

Hace tiempo dije:
“Sé la madre que deseas ser y no la que el entorno quiere que seas”
Esta frase me resonó muchísimo, ya que a veces cuesta encontrar la propia identidad como madre o como padre, ya que el entorno, el miedo, las emociones,… pueden influenciar muchas de las decisiones e impedir escuchar la mamá o papá que hay en el interior, como también ser menos conscientes de cada una de las decisiones.
Aunque cuesta, creo que lo mejor es saber escuchar el propio instinto, escoger lo que más se adapta a cada uno de los miembros de la familia e ignorar opiniones. También evitar idealizar la propia maternidad y las del entorno, como también las de las redes sociales, ya que en la mayoría de familias se viven aventuras maternales y paternales parecidas que cada un@ gestionará de la manera que mejor se adapte a su situación familiar.
Lo repito
“Sé la madre o el padre que deseas ser
y no la que el entorno quiere que seas”
y añado
“Pinta la maternidad del color que tu quieras”
Espero que te resuene
Un abrazo.
Anna